Montería, 9 de diciembre de 2022. En el marco de los componentes Cadena de Plátano y Cadena Piscícola, del proyecto de Seguridad Alimentaria que ejecuta la Universidad de Córdoba a través de la multidisciplinariedad de saberes, un grupo de 150 mujeres rurales de las veredas Armenia, la Cabaña y el Limón, en Canalete, recibieron, por cada hogar, alrededor de mil alevinos de cachama blanca y bocachico, reproducidos en laboratorios del Centro de Investigaciones Piscícolas de Córdoba (Cinpic); y centenares de plántulas de plátano de una semilla limpia, libre de hongos, bacterias y nematodos, además fuerte; y multiplicada en el laboratorio de biotecnología de esta alma mater.

El proyecto se denomina: ‘Fortalecimiento de Procesos de Transferencia y Apropiación Tecnológica y Conocimiento Para Atender Problemas Asociados a la Reactivación Económica y Seguridad Alimentaria, Derivadas de la Emergencia causada por el COVID 19 en el Departamento de Córdoba”, y beneficia a 3.250 familias de los municipios de: Montelíbano, Lorica, Canalete, Moñitos, Tierralta, Valencia, Montería, Cereté, Tuchín, Chinú, Planeta Rica, Chimá y Cotorra.

En Canalete los nativos beneficiados además recibieron herramientas, insumos y abonos orgánicos, para garantizar mejores cosechas. El sitio del encuentro fue una parcela de transferencias donde se encontraron los saberes, científico – académico con el saber ancestral de campesinos, como John Meléndez, quien augura los mejores resultados de una producción acompañada de la ciencia, y que tendrá gran impacto en la región.

“Agradecemos a la Universidad de Córdoba por traernos estos nuevos productos y enseñarnos sobre cómo reproducirlos, esto será de gran beneficio para esta región”, dijo el hombre de gran fidelidad al sobrero vueltiao, después de sembrar el primer colino de plátano junto al rector de esta institución, Dr. Jairo Torres Oviedo, el artífice del modelo extensionista que está llevando la ciencia a los territorios.

Para Torres el acompañamiento de los profesionales e investigadores de la Unicórdoba, en la sostenibilidad de los cultivos genera un impacto, a partir de una transferencia de conocimiento que se complementa con el conocimiento que históricamente tienen los campesinos.

“Estamos garantizando sostenibilidad, buenos resultados en este proceso y sobre todo la apropiación de estas nuevas técnicas y nuevos conocimientos que quedan en las comunidades. Para nosotros esto es significativo y reafirma el compromiso que tiene la universidad de acompañar a nuestras comunidades y acompañar el desarrollo desde lo que nosotros sabemos hacer”, sostuvo el rector de Unicórdoba.

La secretaria de educación de Canalete, Dora Sánchez Montalvo, manifestó su convencimiento sobre la transformación del pensamiento campesino y del desarrollo que impulsará este proyecto en la comunidad.

“En nuestro municipio la llegada de la Universidad de Córdoba con este proyecto significa una nueva forma de replantear la actividad agropecuaria y en especial la producción de alimento. Esto ayudará a transformar el pensamiento de nuestros campesinos”, sostuvo la funcionaria.

En representación de su población rural Boca Al Revés, Irma Oviedo Jaramillo, agradeció que el proyecto tenga en cuenta especialmente a la mujer rural cabeza de hogar. Irma contagió de optimismo a sus coterráneos en cuanto a la expectativa que surge con la producción que se avecina, con mejores cosechas y alimento, que generan mejores ideas de asociatividad.

El proyecto incluye además el componente de ecosistemas diversos, que consiste en ofrecer un paquete de hortalizas y gallinas ponedoras a grupos de mujeres productoras en cada una de las localidades seleccionadas y con disponibilidad de patios, y el componente de cadena ovina para mejorar las razas en las subregiones.