A partir de las líneas de coincidencia de los municipios que conforman esa subregión, en materia agropecuaria, de educación, de bilingüismo, emprendimiento, turismo y otros aspectos sociales, la Universidad de Córdoba liderará un Plan de Desarrollo Subregional para el bajo Sinú, que permita aportar en crecimiento y desarrollo desde el conocimiento y la ciencia.
Así quedó planteado en una segunda reunión de coordinación de la agenda a trabajar en esa zona, conformada por las localidades de: Lorica, Momil, Purísima, Chimá, Cotorra y en cuya proyección también se ha incluido a San Antero, por su cercanía geográfica con esa área.
El rector de la Universidad de Córdoba, Jairo Torres Oviedo, explicó que el trabajo en beneficio de esa subregión surge de un diagnóstico de necesidades que se ha determinado en dos encuentros, el primero con los alcaldes y el segundo con los equipos de trabajo designados para tal fin desde los municipios.
“La universidad prestará su concurso intelectual, técnico y metodológico, teniendo en cuenta que en la alma mater estamos construyendo el Plan de Desarrollo Institucional de los próximos diez años, con expertos nacionales e internacionales en materia de prospectiva. Esto es importante porque es la forma como una subregión se piensa en función de sus particularidades, de sus necesidades y hacia dónde debe dirigirse”, explicó el rector de Unicórdoba.
También agregó Torres que, de materializarse este ejercicio que se ha planteado con las administraciones del bajo Sinú, se estaría constituyendo un modelo de desarrollo para el resto del Departamento, incluso para el Caribe y el país.
La Unicórdoba y la institucionalidad de cada uno de los municipios del bajo Sinú, definieron un cronograma con el que continuarán el trabajo hacia la consecución de metas, a partir de enero y sin perder de vista los objetivos que redunden en mejoras para las comunidades.
“Será una hoja de ruta bien definida, para empezar a operar con las acciones, con el liderazgo de la universidad. Coordinaremos este proceso, desde el entendido que la alma mater posee lo que la institucionalidad no posee, como lo es la ciencia, por eso queremos que nuestra presencia genere transformaciones”, agregó Torres.
A su turno el secretario de educación de San Antero, Julio Díaz Miranda, reconoció la trayectoria de la Universidad de Córdoba en materia de investigación académica y científica, que catalogó el funcionario como el respaldo que requiere un proyecto de esta magnitud, para avanzar en la solución de problemas estructurales en los municipios, muchos de ellos con coincidencias y otros con pequeñas diferencias.
“Con la Universidad de Córdoba queremos trabajar en equipo, desde la premisa de hacerlo con proyección a futuro y que no quede en políticas de momento”, sostuvo el secretario de educación de San Antero.
Entre tanto el secretario de educación de Lorica, Miguel David Torralvo, destacó la importancia de la construcción de una hoja de ruta de trabajo entre los entes territoriales que conforman la subregión del bajo Sinú y la Universidad de Córdoba, como la primera institución de educación superior de la región.
“Seremos aliados estratégicos en el tema de la planificación territorial, para mejorar en los enfoques de educación, desarrollo agrícola, desarrollo empresarial y otros aspectos en los que podemos crecer”, sostuvo Torralvo.