Al tiempo que se ha convertido en la base de sustento de cientos de familias, la berenjena es el cultivo que más prevalece en la subregión del Medio Sinú, en Córdoba, y abastece los mercados de la costa Atlántica y de otras ciudades del país, desde pequeños y medianos sembrados que han tenido mayor fuerza en poblaciones como: el Retiro De Los Indios, San Pelayo, Pelayito, la Coroza, la Pozona, y otras zonas rurales.

El cultivo se está propagando en modalidad de patios productivos, pero también de manera extensiva, de acuerdo con el análisis que comparte el docente Fernando Barraza Álvarez, doctor y magíster en Horticultura, especialista en Suelos y Agua, ingeniero agrónomo de la alma mater, donde además es profesor en el área de cultivos.

“Reportes de agricultores particulares indican que han llegado a sembrar hasta 30 hectáreas de berenjena, además de pequeñas áreas, para el mercado de la Costa Atlántica y el mercado nacional. La dinámica es que los agricultores aprovechan pequeños terrenos, para hacer sus cultivos”, sostuvo Barraza Álvarez.

Agregó el experto en horticultura que a este cultivo le siguen, en su orden, la habichuela, el ají dulce, y posteriormente la calabaza, el pepino, la ahuyama, además de frutas como mamey y níspero, productos que se ofrecen como clúster en las aceras de las carreteras.

“Además de abastecer supermercados en Montería, estos productos también se ofrecen en mercados de Sincelejo, Cartagena, Barranquilla y en algunos casos Santa Marta”, explicó el docente Barraza Álvarez.

Barraza sugirió a los productores cordobeses, especialmente a los del Medio Sinú, buenas prácticas como los controles preventivos, elaboración de buenos drenajes, óptima preparación de suelos, evitar los encharcamientos, sembrar en lo posible en camellones, para evitar el debilitamiento y marchitez de las plantas, que pueden ser síntomas de hongos o enfermedades.

Además insistió en que, después de superados los problemas técnicos que soluciona la Ingeniería Agronómica, un cuello de botella importante es el mercado, con oportunidad del producto en un ciclo de venta que garantice permanencia al cliente y rentabilidad en los productores.