Montería, 16 de junio de 2025. José María Torres Julio volvió a la Universidad de Córdoba después de 22 años, decidido a retomar un sueño que había quedado en pausa y que hoy representa una experiencia de transformación para toda su familia.

A sus 44 años, cursa noveno semestre de Ingeniería de Sistemas en el lugar de desarrollo Lorica; su esposa estudia Administración en Finanzas y Negocios Internacionales, y su hija, María Fernanda, cursa octavo semestre de Derecho en Montería. El más pequeño del hogar, Ian Gabriel, de apenas seis años, ya sueña con estudiar inglés en el Centro de Idiomas de la universidad.

“Creo que soy el estudiante más viejo de la Facultad de Ingeniería. A esta edad es común hacer una maestría o una especialización, pero no empezar un pregrado. Sin embargo, nunca es tarde para cumplir un sueño”, expresa José, quien se desplaza todos los días desde Moñitos hasta Lorica para asistir a clases, al mismo tiempo que dirige su propia empresa.

Su regreso a las aulas está motivado por el deseo de adquirir herramientas académicas que fortalezcan su experiencia profesional. “Vengo ejerciendo la ingeniería desde hace años y decidí estudiar formalmente para potenciar mi empresa con conocimientos sólidos”, señala.
José recuerda que hace 22 años inició estudios en la Facultad de Ciencias Básicas, pero tuvo que interrumpirlos con el nacimiento de su hija. “Desafortunadamente entré en esas estadísticas de deserción, pero regresé porque no hay un límite de edad para estudiar”, afirma.

Los sábados, José, su esposa e Ian Gabriel viajan juntos a la Universidad. Mientras ella asiste a sus clases, el pequeño interactúa con otros niños que hacen parte del Centro de Idiomas, donde ha mostrado interés y habilidades para el inglés. “Desde los cinco años, Ian ha estado muy interesado en aprender por su cuenta. Ve videos, ha aprendido colores, números y otros temas básicos. Está entusiasmado y esperamos que el próximo semestre pueda iniciar formalmente sus cursos”, comenta su padre.

Para el rector de la Universidad de Córdoba, Jairo Torres Oviedo, historias como la de José reflejan con claridad la esencia institucional. “Es ahí donde está la grandeza de la Universidad de Córdoba, el poder transformador que ella encarna, en llegar a los territorios, a las familias, y cambiar vidas”, dijo el profe Jairo.
La historia de la familia Torres es un ejemplo de superación y compromiso con el aprendizaje.