Montería, 25 de octubre de 2024. Estudiantes y docentes del programa de Química, Facultad de Ciencias Básicas, en coordinación con la Oficina del Sistema Integrado de Gestión y la Oficina de Extensión, lideran una iniciativa que impacta considerablemente el desarrollo sostenible de nuestra universidad.
La propuesta de transformación consiste en utilizar los residuos orgánicos de las cafeterías de la universidad, el mantenimiento de zonas verdes y otras fuentes en compost, mediante un Sistema Autónomo de Compostaje.
El sistema permite aprovechar eficientemente los residuos para crear compost de alta calidad, contribuyendo a la economía circular y la autosuficiencia en la gestión de residuos dentro de la universidad.
Esta iniciativa, que surgió desde la Oficina del Sistema Integrado de Gestión, específicamente a través del Sistema de Gestión Ambiental, es una respuesta a la necesidad de implementar proyectos sostenibles en la alma mater, debido a que aborda de manera integral la problemática de los residuos, reduciendo su volumen y contribuyendo a la regeneración de los suelos mediante la aplicación del compost producido.
Además, involucra activamente a estudiantes, docentes y personal administrativo, quienes a través del proyecto fortalecen sus conocimientos sobre gestión de residuos y prácticas sostenibles, transformando el campus en un espacio de aprendizaje integral y de acción comunitaria.
Para el desarrollo de la iniciativa, fueron gestionados recursos con la Oficina de Extensión, lo cual permitió la adquisición de un sistema autónomo de compostaje y un kit especializado para el proceso.
Diferentes mesas de trabajo se realizaron, en coordinación con docentes y estudiantes del programa de Química, donde se articularon esfuerzos para no sólo hacer posible la iniciativa; sino convertirlo en un espacio de aprendizaje práctico, vinculado a la asignatura de Gestión de Residuos.
Cabe resaltar que esta prueba piloto no sólo contribuye a la producción de compost, que será utilizado en los jardines de la universidad para mejorar las condiciones fisicoquímicas del suelo, sino que también será sujeto a pruebas de calidad en el laboratorio de suelos, con el fin de perfeccionar el producto obtenido.
El compost generado también podrá ser utilizado en proyectos de agricultura y huertas sostenibles, ampliando así los beneficios a largo plazo de esta propuesta.