Que Córdoba pierda 100 mil hectáreas en el conflicto limítrofe con el vecino departamento de Antioquia, también es perder dignidad y soberanía, ha manifestado el rector de la Universidad de Córdoba y presidente del Sistema Universitario Estala, SUE Colombia y SUE Caribe, Jairo Torres Oviedo, en el marco de su reciente columna de opinión titulada: Conflicto Limítrofe Entre Córdoba y Antioquia, Defensa y Territorio.
“En relación con lo anterior sería recomendable que este tema se convirtiera en debate público y que haga parte de la agenda departamental, de igual modo, que la ciudadanía cordobesa lo conozca y participe en su deliberación, esto ha faltado y con ello la indolencia e indiferencia de quienes han gobernado el Departamento, lo que tradicionalmente ha sido evidente”, sostuvo el rector de la Universidad de Córdoba.
Torres Oviedo sugiere adicionalmente en su ejercicio reflexivo y pedagógico, que el conflicto limítrofe con Antioquia debe involucrar a todos los habitantes del Departamento, pero además entrar en su defensa. Justo en este epígrafe se remonta el académico, a los antecedentes históricos del citado conflicto, y que datan de episodios como la sanción de la Ley Novena (1951), que creó al departamento de Córdoba, sin límites taxativos, que pasó por momentos jurídicos, y ha estado rodeado por un largo litigio y una larga controversia.
“La soberanía y defensa del territorio cordobés ha estado amenazada y prácticamente vulnerada, no solo por la acción expansionista y colonizadora de los antioqueños, sino por la indiferencia y miopía de quienes han gobernado a Córdoba. No obstante, hay que continuar con la reflexión sobre la génesis y evolución de este conflicto limítrofe, definir estos límites ha sido uno de los litigios más largos en la historia de Córdoba… es un tema de vital importancia para los intereses de nuestro Departamento, donde no se ha prestado la atención debida y contrario a esto los antioqueños sí se han preparado para este proceso”, sugiere el rector de Unicórdoba.
Finalmente apunta que aún estamos a tiempo de defender lo nuestro, y recuerda que la defensa en este conflicto no debe ser de menor calado porque está en juego la soberanía y la dignidad del territorio cordobés. Torres deja como reflexiones adicionales, por un lado, lo que ha sido la presencia social e integral de la institucionalidad cordobesa en los territorios, y por otro lado, la riqueza con que esa zona fue premiada por la naturaleza, que ha motivado adicionalmente el conflicto y lo ha vuelto llamativo.