*La mayoría de los casos ocurren en menores de cinco años, por consecuencia de daño cerebral, anemia o daño renal agudo.

Montería, 8 de junio de 2022. La malaria ha estado en la humanidad toda la vida y tanto es el daño que sigue ocasionando que cada año mueren en el mundo aproximadamente 600 mil personas, la gran mayoría menores de cinco años, por causas asociadas a deterioro en el cerebro, deterioro renal agudo, malaria placentaria y anemia severa.

Esas 600 mil personas que fallecen hacen parte del 1 % de pacientes que padecen malaria complicada entre los 240 millones de casos al año en el mundo, el 90 % reportados en África, con un amplio porcentaje de manifestación sin complicaciones. El paciente puede presentar en el mejor de los escenarios fiebre, sudoración, posible vómito, pero si la enfermedad es tratada a tiempo puede manejarse.

Las cifras y la conceptualización las expresa el científico español Julio Gallego Delgado, docente e investigador en City University New York, invitado por la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Córdoba, para compartir espacios académicos con estudiantes de pregrado y posgrado de la citada facultad.

“Existen alrededor de 240 millones de nuevos casos de malaria todos los años, el 90 % producto del Plasmodium falciparum y casi todos los casos se encuentran en África, allí está también el 90 % de la gente que muere, es una enfermedad que sigue matando”, sostiene el científico invitado por Unicórdoba, PhD en Biología Molecular y Biomedicina.

Agrega el experto invitado por esta alma mater que las vacunas contra la malaria están siendo cada vez más difíciles de conseguir, de lo que en principio los investigadores científicos se podrían imaginar.

“La ciencia lleva intentando conseguir estos biológicos hace mucho tiempo y termina fracasando, porque ofrecen una protección inferior a la que debería tener una vacuna más efectiva. Se trata de un parásito que lleva en circulación en la tierra muchos más años que nosotros, es decir, se ha diversificado, ha tenido variedad genética”, explica el Dr. Julio Gallego Delgado.

Finalmente destaca que Colombia es un buen referente mundial en términos de investigación sobre esta enfermedad y clasifica a la decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de Unicórdoba, Dra. María Fernanda Yasnot Acosta, entre las científicas más comprometidas con la disciplina desde la investigación que se hace en esta alma mater, de cuyos laboratorios resaltó además el alto nivel de bioseguridad.

Causalmente la Universidad de Córdoba hace un gran aporte científico en la investigación que, junto a la Universidad de Antioquia, busca la creación de una vacuna específica contra la malaria placentaria, con trabajo de campo realizado con estudios de caso en el sur de Córdoba. Parte del trabajo se hace desde el Grupo de Investigaciones Microbiológicas y Biomédicas de Córdoba, GIMBIC, adscrito a la Universidad de Córdoba.