El trabajo de extensión lo realiza la Universidad de Córdoba en siete de las 14 comunidades en área de influencia de Cerro Matoso.
Con la graduación de 70 líderes en procesos de construcción de línea de base social, en el marco de un diplomado de 120 horas, concluyó una primera etapa del proyecto de extensión de la Universidad de Córdoba: Acompañamiento a las Juntas de Acción Comunal (JAC) del Área de Influencia de Cerro Matoso, liderado por la facultad de Ingenierías.
A partir de la intervención de la alma mater las comunidades nativas y afros de esa zona, en la subregión San Jorge, cuentan con ficha veredal y predial, matriz de actores, servicios ecosistémicos y otros componentes sociales para el estudio de impacto ambiental que debe cumplir la empresa minera en el marco de la nueva licencia y con base en la exigencia de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA).
Biviana Soto Barrera, docente del programa de Ingeniería Ambiental, de la Unicórdoba, sostuvo que el acompañamiento se ha realizado en las comunidades de las poblaciones rurales Bocas de Uré, Puerto Colombia, Centro América, Torno Rojo, la Estrella y la Odisea.
“Hemos querido acercarnos a las comunidades del San Jorge, particularmente las del área de influencia de Cerro Matoso, a través de un convenio. El objetivo ha sido el acompañamiento en la socialización del estudio de impacto ambiental para la nueva licencia que requiere la compañía, además del levantamiento de línea de base social”, explicó Soto Barrera.
Mónica Oyola Pérez, presidente de la junta de acción comunal del corregimiento Centro América, Puerto Libertador, destacó el aporte de la Universidad de Córdoba para con los nativos del área de influencia de la empresa minera, en términos conocer los mecanismos que permiten evaluar el impacto ambiental por la explotación del níquel en su territorio.
Carlos Sánchez, ingeniero ambiental de la Universidad de Córdoba, explicó que se trabajaron los componentes atmosférico, biótico, hidrológico, biológico y de suelo, y a partir de allí se definieron medidas de manejo, propuestas por la comunidad y ajustadas por la institución educativa.